El champú básicamente es un detergente, eso sí, diferente a los utilizados para limpiar la ropa, los platos e incluso el de las manos. Independientemente de los tipos de champú utilizados, su objetivo debe ser eliminar el exceso de aceite, suciedad y restos de piel y de cabellos. La concentración del detergente está entre el 10% y el 15%. Además los champús pueden incorporar otros agentes como anticongelantes, clarificantes, espesantes, proteínas, constructores de espuma, agentes anti-caspa, etc. en una proporción del 1 al 10%.

División tipos de champú según sus componentes

Según esto, tenemos los que son únicamente limpiadores y los que llevan agentes acondicionadores y por tanto son limpiadores y acondicionadores.Los grados de acidez oscilan entre un PH de 5 y un PH de 7,3 estos últimos de uso médico. Sea cual sea el champú adecuado para una persona lo recomendable es alternarlo con uno suave.

Tipos de champú según el tipo de pelo

Hay miles de champús para miles de tipos de pelo, para cabellos rizados, lisos, debilitados, quemados por el sol, puntas abiertas, naturales… Se podría escribir una enciclopedia pero como no la leerías solo os contaremos a cerca de los más normalitos.

Champú para cabello seco

Lo aconsejado para el cabello seco sería un champú que:

• Contenga algún tipo de aceite como puede ser el de jojoba, almendras o coco, o bien glicerina que actuarán alisando la cutícula y suavizando el pelo en general, también es bueno que contengan aminoácidos, minerales y proteínas hidrolizadas.
• No debe tener sulfatos.
• También es buena idea que aporten algún antioxidante como la vitamina E.

Por lo general se trata de champús cremosos y el detergente limpiador al ser más natural no hará tanta espuma, pero eso no ha de preocuparnos ya que el efecto limpiador debería ser el mismo. Suele ser una buena idea en este tipo de cabello utilizar un champú para bebes ya que estos usan unos detergentes más delicados.

Champú para cabello graso

Este tipo de pelo, necesitará un champú que:

• Tenga  componentes que absorban el exceso de grasa, dado este condicionante hay una gran variedad de champús hechos a base de limón y de hierbas aromáticas, como el romero, la salvia o la manzanilla.
• Que tengan «pantetol” (vitamina B5) que aportará cuerpo al cabello.

Suelen ser de tipo no cremosos y por lo general no se presentan combinados con el acondicionador que complicaría su efectividad, de usar acondicionador, se hará más tarde, evitando en la medida de lo posible el contacto directo de este con el cuero cabelludo.

Champú contra la caspa

Tratan de evitar el descamado del cuero cabelludo y la picazón. Se suelen hacer a base de fungicidas como el zinc pyrithione, otras veces se usa el ketoconazol o el ácido salicílico. En casos muy extremos un médico puede recetar champús a base de otro fungicida el selenium sulphide.

Champús en seco

Son productos a base de talco en polvo o en espray que se espolvorean sobre el cabello y luego se cepillan. Buenas prácticas con este tipo de champú serían:

•  Utilizar una brocha de pelo fino y aplicar muy poca cantidad.
• Si se usa un spray hacerlo a una distancia de unos 30 cms. del pelo.
• Masajear bien todo el pelo y el cuero cabelludo con los dedos y cepillar de dentro hacia fuera procurando retirar todo el producto.
• Si las puntas han quedado secas y encrespadas habrá que usar un hidratante de puntas.

Estos productos no pueden sustituir la limpieza de un champú con agua, diremos que se utilizan en situaciones de emergencia (tal vez estés en el desierto y no dispones de agua o lo que es más normal, estés en una fiesta y tengas que salir del paso). Sus efectos pueden ser de unas pocas horas.

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