Retocar un Trasplante capilar mal hecho

Un retoque de trasplante capilar es una cirugía secundaria muy habitual para complementar o corregir una cirugía anterior que no se ha realizado adecuadamente . Para poder realizar un retoque será necesario que todavía exista una disponibilidad de folículos de las zonas donantes.

Retoque de trasplante capilar

Motivos para un retoque de trasplante capilar

El hecho de realizar un retoque no implica que la primera intervención se realizara de forma incorrecta, aunque en ocasiones si es el problema, de hecho parece haber un auge en las reclamaciones por injertos capilares mal realizados en países “low cost” donde tanto el estudio previo del paciente como el posterior seguimiento tras la operación son por decirlo de una manera suave bastante deficientes.
Hace ya muchos años cuando empezaban a practicarse los trasplantes capilares era muy común el llamado efecto de “pelo de muñeca” producto de la técnica que entonces se utilizaba y en la cual se trasplantaron grupos de folículos pilosos simultáneamente. El resultado era como el de las muñecas que tienen en la cabeza puntos regularmente separados de los que brotan muchos pelos, lo que evidentemente es muy antinatural. Para su corrección había que volver a extraer uno a uno cada folículo con la técnica FUE para volver a implantarlo ahora sí de forma correcta. Pero esto ya casi no se hace pues ha pasado bastante tiempo de eso y además por aquel entonces el trasplante capilar era muy costoso y poca gente recurre a él.
Muchas veces el paciente se ajusta a un presupuesto y posteriormente se decide a hacer una segunda o tercera cirugía que mejore los resultados. Pero lo que suele suceder es que la alopecia sigue avanzando.
Las causas más comunes para un retoque de trasplante capilar son las siguientes:

  • Ángulo de los folículos trasplantados incorrecto.- Los injertos de los folículos se deben orientar en la misma dirección al crecimiento natural del pelo, cuando esto no se hace correctamente se evidencia con efectos de remolinos y dando la impresión de encrespamiento del cabello.
    Es posible extraer un folículo ya trasplantado y volver a trasplantarlo en una nueva ubicación que podría ser muy próxima pero no exactamente la misma y esta vez sí debería tener la orientación correcta.
  • Poca densidad en las zonas más visibles.- La solución será intercalar nuevas unidades foliculares procedentes de las zonas donantes.
    Un caso menos habitual, pero que algunas veces se puede dar es que la densidad en las zonas repobladas sea demasiado alta lo que provocará también un resultado poco natural. Entonces habrá que clarear adecuadamente la zona y aprovechar los folículos para “retrasplantarlos” a otras zonas que seguro los necesitan.
  • La línea frontal de los implantes.- Los folículos trasplantados se toman de áreas que no sufren la alopecia androgenética y no la sufrirán en su nueva ubicación. Con el tiempo la alopecia androgenética continúa actuando siguiendo el patrón de Norwood-Hamilton (en los hombres) que va avanzando normalmente desde las sienes y desde la coronilla, este avance hace que los folículos trasplantados de la línea frontal se vayan aislando del resto del cabello quedando por detrás de esta línea unas zonas con calvas.
    En este caso el retoque de trasplante capilar estará destinado a cubrir esas nuevas áreas calvas que aparecen tras la línea frontal. Es por este motivo por el que un buen diseño inicial debería tener en cuenta un futuro avance de la alopecia y no intentar ser “demasiado agresivo” con la línea frontal y fijarla en una posición no demasiado adelantada hacia la frente.
  • El retoque en las mujeres.- A diferencia de los hombres el avance de la alopecia androgenética se hace de una forma más difusa, según un patrón bien diferenciado (escala de Ludwig), en el cual se van miniaturizando los pelos de forma generalizada por la parte superior de la cabeza y van muriendo los folículos pilosos produciéndose un efecto de “rarefacción “ o clareado generalizado por esta zona.
    El nuevo trasplante incidirá en las zonas más exteriores pero también habrá que repartir los folículos por toda esta zona superior.

No agotar las zonas donantes en previsión de un retoque de trasplante capilar

Cuando se hace el estudio previo al trasplante es muy importante contar con folículos de reserva para poder solventar los posibles casos que hemos expuesto.
Cabe la posibilidad de utilizar otras zonas donantes diferentes a la parte posterior de la cabeza y los laterales, los folículos se pueden extraer del pecho o incluso del pubis, esta técnica es conocida como BHT, pero solo se utiliza en casos particulares, ya que las características del pelo de la cabeza y el resto del cuerpo son muy diferentes y el resultado, muy probablemente, no será el adecuado.
La densidad del pelo varía mucho de unas personas a otras pero podemos establecer que para la raza caucásica es de un folículo piloso por milímetro cuadrado, lo que nos da una media de 2,5 pelos por milímetro cuadrado. Una extracción razonable sería aquella que no dejara una densidad inferior a los 0,8 folículos por milímetro cuadrado y en casos extremos donde ya no cabrían más posibilidades de retoque sería de unos 0,5 folículos lo que la dejaría en un pelo o algo más por milímetro cuadrado en las zonas donantes.