El injerto capilar y los políticos españoles
Nuestros políticos cuidan cada vez más su imagen y tratan de mantenerse en forma a toda costa. Son célebres las jornadas de running de Mariano Rajoy, la dieta de Susana Díaz o el entrenamiento de José Mª Aznar para conseguir un cuerpo con “tableta”. Tampoco los dirigentes dejan al margen el cuidado de su cabello. Era conocida la preocupación de Iñaki Anasagasti por su calva al peinarse de lado o el tinte marrón del pelo de Rajoy tan distinto a su barba blanca. Atrás quedaron los años en que a Felipe González le pintaban canas para que representara más madurez.
Ahora los dirigentes hacen todo lo posible por parecer más jóvenes y, la calvicie, precisamente no les ayuda. Animados por el éxito del trasplante capilar de famosos como el tenista Rafa Nadal, el presentador Joaquín Prat o el socialista José Bono, algunos líderes políticos también se han “apuntado” al injerto capilar.
El injerto capilar y los políticos españoles: El caso de José Bono
El caso del socialista José Bono marcó un antes y un después en la historia del trasplante capilar en España. Además, es de los pocos personajes públicos que lo ha admitido abiertamente.
Después de unas vacaciones, Bono sorprendió con un aspecto mucho más joven y todo gracias a un implante de pelo. El por entonces presidente del Congreso no podía imaginarse lo que iba a influir su decisión en los demás. Muchas personas, famosas o no, acudían a las clínicas de trasplante capilar para preguntar si su calvicie tenía marcha atrás. Algunos comentaban que se habían decidido a hacerlo precisamente al ver el buen resultado de José Bono. Las intervenciones de cirugía capilar en el año 2009 se multiplicaron.
Estos son algunos políticos españoles que se han sometido a un trasplante de pelo recientemente y han conseguido muy buenos resultados.
El injerto capilar de Iván Redondo
Iván Redondo, director del Gabinete del presidente del Gobierno Pedro Sánchez, se ha sometido con éxito a un trasplante capilar. Este asesor de 37 años ha rejuvenecido al librarse de sus entradas y repoblar su cabeza.
Si se tira de archivo, es evidente que, a lo largo de la actividad política de Redondo, ha crecido el pelo de su frente de forma espectacular. No hay más que revisar sus apariciones públicas anteriores a la moción de censura que llevó a Pedro Sánchez a La Moncloa, en las que Redondo tenía mucho menos pelo.
El injerto capilar de Albert Rivera
La imagen del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha cambiado de forma evidente en los últimos años. Como cualquier personaje expuesto a la opinión pública sabe que debe cuidar su aspecto al detalle. Rivera se ha propuesto mostrar un look elegante, correcto y, a la vez, informal y joven. El valor principal que quiere trasmitir su partido es la renovación y la juventud y la caída de pelo es un problema para él porque sus votantes lo pueden entender como un declive.
Albert mostraba antes unas grandes entradas, pero ahora luce un volumen de pelo que un hombre de 38 años no suele tener. Rivera también ha cambiado la forma de peinarse para adecuarse al momento actual y a sus adversarios. Lleva el pelo más ahuecado pensando que con eso transmite más seguridad. Si Ciudadanos perdiera ese aire de juventud que significa renovación, sería como si Pablo Iglesias se cortara la coleta, que se identifica con rebeldía.
El gabinete de prensa de Ciudadanos asegura que Rivera no se ha realizado ningún injerto capilar, que su nueva cabellera es fruto de unas pastillas que toma con regularidad. Hay mucha gente que lo duda…
El injerto capilar de Ignacio Aguado
Ignacio Aguado, el portavoz de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid, apareció el año 2017 con una cabeza mucho más poblada que antes y sus entradas habían desaparecido.
Parece que Aguado se ha realizado un microinjerto capilar muy efectivo, tanto que incluso puede llevar tupé. El político de 38 años desapareció de la escena pública durante los meses de julio y agosto y regresó en septiembre con el pelo muy corto. Conforme pasaba el tiempo, lo que al principio parecían unos puntos oscuros en el cuero cabelludo eran vello que crecía hasta ocultar por completo los claros de la cabeza.
Aunque Ignacio no ha reconocido ante los medios que se ha sometido a una cirugía de trasplante capilar, es evidente que sí porque han cambiado sus fotos en la sede de Ciudadanos. Cuanto mejor aspecto tengan los políticos en los carteles, más votos recibirán.
Como vemos, la calvicie es un problema que afecta también a la imagen de los políticos. Perder el cabello no es solo una cuestión de autoestima, implica otras cosas como ser aceptado por parte de los demás y, en el caso de los políticos, eso es muy importante. El injerto capilar es una buena solución para recuperar el cabello y, de paso, el aspecto juvenil que todos deseamos tener.