¿Hasta cuándo crece el pelo?
Para el crecimiento del pelo, es necesario que haya un aporte de energía a la matriz de los folículos pilosos, donde un grupo de células se dividen creando nuevas células de queratina que es la base del pelo. Esta energía se obtiene por la combustión de la glucosa con el oxigeno y como no podía ser de otra forma, el aporte de glucosa y oxigeno deja de producirse con el fallecimiento.
Entonces, ¿de dónde viene esa historia de que el pelo crece cuando una persona fallece?
La explicación podemos decir que es un efecto óptico, lo que ocurre realmente es que los tejidos se van deshidratando y el cuero cabelludo va reduciendo su espesor dejando a la vista una mayor parte del pelo. En algunas ceremonias funerarias en las que se rapa el pelo de la barba y la cabeza, el efecto puede resultar sorprendente, pues al cabo de unos días se observa que hay pelo y barba donde antes no había. Es normal, el pelo se cortó a ras de la piel y esta se ha retraído, asomándose la parte del pelo que antes quedaba oculta. Otro tanto ocurre con las uñas, de las que también se dice que crecen después del fallecimiento, cuando lo que pasa es que la piel que las rodea va disminuyendo en un proporción de entre el 60 o 70%, haciendo el efecto de crecimiento.
Historias de crecimiento de el pelo post-mortem
La leyenda de la niña de la catedral de Guadalajara (Jalisco – México)
Cuenta la leyenda que una niña, huérfana de madre, llamada Inocencia quería hacer su primera comunión, hecho al que su padre se oponía. La niña al pasar por una escuela donde se catequizaban otros niños oyó los rezos y cantos de estos y empezó también a cantarlos, ante la piadosa situación la invitaron a entrar y la prepararon también a ella para tomar el cuerpo de Cristo, regalándole incluso su traje de primera comunión.
Llegó el día y la niña hizo su primera comunión. Al contárselo a su padre, este cogió el cuchillo con el que estaba cocinando y la mató.
Hoy en día la momia de la niña se encuentra en la catedral de Guadalajara, en el estado de Jalisco (México) y dicen que todavía le crece el pelo y las uñas, también abre y cierra los ojos de vez en cuando.
El crecimiento del pelo post-mortem es un recurso que se ha utilizado por algunos escritores para sus novelas y por supuesto dentro del “Realismo Mágico”:
Del amor y otros demonios
En esta maravillosa novela de Gabriel García Márquez se cuenta la historia de Sierva María de Todos los Ángeles, que recluida en un convento para ser exorcizada vive una historia de amor con su exorcista, al ser descubiertos trasladan a su amante Cayetano y Sierva María, que no sabe porqué ha desaparecido Cayetano, deja de comer hasta morir. Entonces podía verse como brotaba el pelo después de la muerte.
Gabriel García Márquez escribió esta novela tras cubrir como periodista una noticia en la que durante la remodelación de un convento como hotel, se halló, estando él presente, el cuerpo de una niña en la cripta de Sierva María, que “medía 22 metros y 12 centímetros”.
El pelo de Buda
No es que se diga que el pelo de Buda crecía después de su muerte, pero dado la cantidad de pelos de Buda que hay repartidos en santuarios por los diferentes países budistas diríase que más que crecer se le ha multiplicado. Es curioso el caso de la Golden Rock en Myanmar, una roca recubierta durante años de finas capas de oro, que parece suspendida en un precipicio y que según dicen se sustenta en un pelo de Buda.
Este hecho de la multiplicación del pelo de Buda, no es singular y podría aplicarse a otras muchas reliquias de otras religiones como podría ser la cristiana donde se pueden hacer unas cuantas cruces con los fragmentos (autentificados por el Vaticano) de la Vera Cruz, o como pasa con el santo prepucio de Cristo, que debería medir unos cuantos metros, si se unieran todas las reliquias de este que se encuentran repartidas por la cristiandad.